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LECCIÓN #5 – Compromisos Claros y Específicos

Un Camino a la Comunicación y la Delegación Efectiva.

Tener metas y objetivos, con un plan de acción es fundamental, sin embargo, avanzar solo es posible tomando acción masiva, enfocada, constante y evaluada, y para ello, priorizar utilizando la ley de Pareto, para definir los compromisos alineados a los principales objetivos o magníficas obsesiones como los llama Anthony Robbins, será fundamental.

Esta imagen nos refresca el enfoque que requerimos tener. Recordando que el éxito, los resultados, la productividad y el bienestar, son alquilados y hay que pagar el alquiler todos los días de forma consciente e intencionada en nuestro crecimiento.

En ese sentido, es fundamental que entiendas que, de acuerdo a los objetivos, los NeuroCiclos y las actividades de alta rentabilidad, es necesario adquirir compromisos para ejecutar en meses, semanas y/o días.

La siguiente imagen te recuerda 4 elementos a tener en cuenta en el proceso para definir compromisos.

Para apoyarte en este proceso de crecimiento y expansión, te vamos a compartir dos elementos extra que te ayudarán a definir compromisos claros y específicos, de una forma efectiva.

El primero es entender que existen los pedidos, las ofertas y las promesas, y que cuando hacemos cosas con otras personas o trabajamos en equipo, usamos uno o dos de estos elementos.

Entenderemos un pedido, como el acto lingüístico donde evidenciamos que tenemos una necesidad, situación, problema o nos hace falta algo, y en esa consciencia, buscamos el apoyo o ayuda de alguien hábil, idóneo o experto en el tema para solventarlo. Este pedido puede ser aceptado o rechazado, y nuestro interés es ser ayudados. Por ejemplo, si nos varamos en el carro, buscamos un mecánico; si nos duele un diente un odontólogo. Es importante que sea alguien idóneo, pues en ocasiones le pedimos consejos de negocios a personas con mentalidad de empleados, o le consultamos como arreglar nuestra relación afectiva a alguien que está separado. Tener criterio a quien solicitar ayuda es fundamental, por una solución efectiva en tiempo, recursos y calidad.

En el caso de la oferta la entenderemos como el acto lingüístico donde identificamos que alguien tiene una necesidad, situación, problema o le hace falta algo, y de acuerdo a nuestro talento, experiencia y capacidad de acción o de gestión, le hacemos una oferta irresistible para ayudar a solucionarla. En este caso es importante ser idóneos para ofrecer nuestra ayuda, identificar quienes observamos que tienen la necesidad, si son conscientes o no de ella y ayudarles a que tomen la decisión de solucionarla. Esta oferta puede ser aceptada o rechazada, y nuestro interés prioritario es ayudar.

Y para finalizar esta parte entenderemos las promesas, cuando alguien acepta un pedido o una oferta de otra persona en las condiciones planteadas de tiempo, precio, calidad, contexto, entre otras. por ejemplo, entenderemos que hay una promesa cuando Adrián que se le varó el carro, recurre a Jorge a que se lo arregle, él acepta, y ambos acuerdan ¿qué se hará, para cuándo, en qué precio, con qué calidad y qué garantía?

En este contexto surge el segundo elemento que quiero obsequiarte y es la delegación, y para facilitar su comprensión, lo entenderemos como cuando una persona percibe que es más efectivo confiar en otra persona, la realización de algo que es necesario hacer, en unas condiciones, características, cantidad, calidad y temporalidad específica. Para ello es fundamental que nos aseguremos de transmitir con claridad y chequeando la comprensión de tus compañeros, socios, empleados o contratistas, de estos 7 conceptos básicos, para mejorar el proceso y los resultados.

Te lo menciono, porque en mi experiencia con más de 350 empresas, el hacer con otros permite llegar más lejos y hacer cosas mucho más grandes, y se facilita en la medida que la comunicación es clara, precisa y entendida por los participantes.

En ese sentido los 7 elementos son:

    1. Qué debe hacerse: en este aparte será necesario que la persona sepa con claridad, con exactitud, sin asomo de dudas, en qué consiste su tarea, para qué fue contratado y cuáles son las expectativas.
    2. Qué resultados se esperan: en este espacio, se fijarán los criterios de aceptación, calidad, cantidad o estilo, para saber que el trabajo se finalizó satisfactoriamente, que se alcanzaron los objetivos propuestos. También, cómo será la evaluación final de la tarea , si es necesario o no un informe, y como será.
    3. Por qué debe hacerse: en este aparte será fundamental que la persona entienda el impacto de su labor, la repercusión de sus tareas, que sepa que su trabajo es valioso y lo haga con motivación.
    4. Quién debe hacerlo: En este caso, se debe clarificar las responsabilidades, que haya límites en las funciones, que no haya espacio para las disculpas o los malos entendidos.
    5. Cuándo debe hacerse: en este aparte, es necesario que se fijen plazos de entrega, a sabiendas de que son los adecuados y necesarios para cumplir con las tareas previstas y que se complete con éxito.
    6. Cuándo hacer informes del progreso: si es necesario, determinar instancias para revisar cómo avanza el proceso: qué corregir, qué reforzar, qué modificar, qué implementar, para garantizar calidad, condiciones y tiempos de entrega.
    7. Cómo hacer esos informes: en caso de haberse establecido, definir la estrategia más adecuada para que se entreguen informes parciales de las actividades, con el fin de aplicar las medidas requeridas (una llamada, un correo electrónico, un archivo Excel, un resumen semanal, y los elementos a reflejar).

Espero que estos dos elementos de actos lingüísticos y claridades en el proceso de delegación, te sean de utilidad para definir tus compromisos y los de tu equipo, gestionando efectiva el tiempo, el talento y los recursos con que disponen.

Te felicito por tus avances y crecimiento, por tu compromiso y honestidad, recuerda que lo más valioso de cualquier proceso es lo que podemos poner en práctica e incorporar en nuestra vida cotidiana, ajustándolo de la manera que nos ayude a avanzar, y enfocados en lo que deseamos lograr.

Si en tu caso decides acelerar tu curva de aprendizaje y ahorrar tiempo, dinero y esfuerzo, te invito a revisar en este enlace el programa digital “El Diamante de la Maximización de Resultados”  un programa donde puedes aprender a maximizar tus resultados,

    1. Tomando acción, consciente, masiva, enfocada, constante, evaluada y urgente.
    2. Educando tu mente, tu cuerpo y tus emociones para que sean tus mejores aliados.
    3. Priorizando y enfocando tus recursos, tiempo y energía, en los objetivos principales.

Paso a paso, viviendo el proceso y ajustando lo que sea necesario en una actitud permanente de cómo si es posible y cuál es el siguiente paso.

En la siguiente lección podrás aprender cómo hacerle seguimiento a los resultados y los aprendizajes, para poder avanzar intencionadamente.

¡Nos vemos mañana!

Un abrazo fraterno,

Adrián Vargas👍

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